viernes, diciembre 02, 2011

A la niña del espejo...

Eres una tonta, tonta. Jamás vas a ser más que eso. Durante tu vida sólo te has dedicado a lastimar y alejar a los demás... y después te quejas porque nadie nunca está ahí para ti, porque estás sola y ni tu misma te quieres. ¿Por qué no puedes ser una buena hija, hermana o simplemente buena persona? Andas siempre por ahí esperando causar admiración y aprecio de los demás hacia ti y haces y eres lo que los demás quieren sólo para que te acepten, pero en el fondo eres tan arrogante, tan estúpida e inútil que sólo terminas por darte cuenta de que te has mentido mucho. Que no eres tan inteligente, fuerte, bella y buena amiga como pensabas; eres un fracaso, un error. Cuando al final te ves al espejo te das cuenta de que en realidad, debajo de la máscara hay una persona fea, horrible. Por eso no tienes amigos, por eso las personas de tu edad nunca entienden lo que sientes, por eso tus hermanos te tienen miedo y tu mamá te dice que siempre haces las cosas mal. Si, tu mamá, la que te puede hacer sentir la mejor o la peor persona del mundo en un minuto... pareciera que ella no se da cuenta pero, sus opiniones te importan más que las de cualquier otra persona. Y es aquí donde piensas, ¿tendrá razón en todo lo que dice? ¿será que en verdad existen tantas partes opuestas dentro de mi? en un momento te dice que eres muy inteligente, que eres una mujer hermosa y que eres de gran ayuda y apoyo para muchas personas; pero al siguiente minuto y sin siquiera advertirlo puede hacerte sentir la persona más inútil, cobarde, estúpida (y a la lista sigue y sigue y sigue...) Te consuelas pensando que estás en el lugar equivocado, en la escuela equivocada, en la familia equivocada, con las personas equivocadas e incluso en el cuerpo y la mente equivocados. Pero hay que admitirlo tal vez la única falla eres tu y quizá si no estuvieras todo sería mejor.

A veces quisiera desaparecer...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Hazme sonreir.